La depresión a veces sonríe

Publicado el 27 de mayo de 2025, 13:13

Desde afuera, todo parece casi normal. Sonríe a veces, pasea, incluso hasta bromea. Pero adentro hay una tormenta silenciosa que no cesa, un eco constante que repite: ya no eres tú. La mente de un depresivo no es simplemente una mente triste. Es una prisión invisible, donde los barrotes son pensamientos, y la celda es el propio cuerpo.

La mente de un depresivo se desgasta con batallas internas que no se ven. Luchar para levantarse, para responder un mensaje, para decir “estoy bien” o “sonreír” sin romperse y no porque se quiera mentir, sino porque como se explica el dolor cuando no tiene forma? Sabiendo además que siempre habrá un de vuelta “lo estás haciendo muy bien”.

Si alguna vez logras identificar a un depresivo, se amable, detrás de cada sonrisa hay una mente que clama comprensión

La depresión no siempre grita, muchas veces susurra, o se disfraza de muchas cosas. 

Se instala lentamente dentro ti como niebla que borra los colores del mundo.

Y sin embargo, en medio de esa oscuridad, hay un lucecita tenue que a veces brilla: la esperanza. A veces viene de una mirada, de una palabra, de la conversación que escuchaste de un ajeno o tan solo de un abrazo. A veces viene de la simple resistencia de decir: “ un día más que no me rendí”.